Los robots ayudan a embalar porciones de queso con rapidez y eficiencia
La empresa A-ware de Zeewolde lleva años trabajando con Robertpack. El especialista en embalaje de Zeewolde suministra máquinas con robots FANUC integrados. Estos robots ultrarrápidos se aseguran de que las porciones de queso se envasen y paleticen de manera rápida y eficiente.
A-ware Food Group es una organización especializada en el madurado, corte, embalaje, almacenamiento y transporte de quesos y otros productos alimenticios en condiciones controladas. Esta empresa familiar se creó en 2010 tras la fusión de Anker Cheese (1962) y Bouter Cheese (1890). Anker Cheese se ha convertido en una empresa quesera internacional. En mayo de 2010, las actividades de Anker Cheese se dividieron en dos "nuevas" empresas: Anker Cheese (actividades comerciales) y A-ware (almacenamiento y logística). En junio de 2010, A-ware fue adquirida por Fresh Support, un proveedor independiente de servicios de embalaje especializado sobre todo en quesos. Bouter Cheese se centra en el procesado (madurado, corte, embalaje y distribución) de quesos holandeses y extranjeros a la mayor cadena comercial de los Países Bajos, entre otros.
Grupo alimentario en crecimiento
Tras la fusión, la sociedad ha expandido los límites de A-ware Food Group, con gran cantidad de sucursales y unos 1.600 empleados. Y no deja de crecer. El año pasado adquirió Schipper Cheese (Zaandam) y la propia A-ware ha decidido hace poco construir una planta quesera en colaboración con Fontera, la cooperativa neozelandesa de productos lácteos. Esta planta entró en funcionamiento en 2014. En las instalaciones de Zeewolde, los responsables de embalaje se entrevistaron con Annelies Vander Hulst, asistente de marketing de FANUC, Robert van Dien, responsable de TD de A-ware, Eric van Houwelingen, director de proyecto de A-ware, y Bertus Visch, director de proyecto de Robertpack, sobre el uso de robots para el embalaje y el paletizado de porciones de queso.
Robertpack colabora desde hace años con el grupo Bouter en Culemborg y les ha proporcionado líneas de embalaje que incluyen robots FANUC. Robertpack instaló una línea de robots en las instalaciones de A-ware de Zeewolde y unos meses más tarde la segunda. Van Houwelingen y Van Dien están estrechamente involucrados en estas inversiones. Van Houwelingen afirma: ‘Nuestra experiencia con los robots FANUC en Culemborg ha sido positiva. Aquí, en Zeewolde, tenemos robots de varias marcas. Especificamos los requisitos de los robots que deseamos utilizar. Nuestro principal objetivo es realizar una función determinada. La línea de embalaje tiene que funcionar perfectamente; además, escuchamos los consejos de nuestros proveedores, en este caso, Robertpack”.
Mayor grado de integración
“Al principio, los robots eran dispositivos de montaje independientes’, explica Bertus Visch. ‘Ahora, los instalamos en las máquinas de embalaje, porque esto nos permite lograr movimientos complejos con ellas. Esto es, sin duda, algo imprescindible en A-ware, donde tenemos que utilizar altas velocidades. Cuando la visión y el line tracking son importantes, elegimos FANUC.
Annelies Vander Hulst confirma el aumento en el uso de robots. Estos se suministran a través de los fabricantes de máquinas e integradores de sistemas, y vemos que con frecuencia se integran en la propia máquina con objeto de incrementar la eficiencia, el ahorro en costes y la seguridad.
Conocimientos básicos incorporados
El motivo de la inversión reciente ha sido el aumento de la demanda del mercado y la ampliación de la gama. Para A-ware, la tecnología robótica significa ampliar conocimientos. Van Dien: ‘Es evidente que nuestras líneas no pueden permanecer paradas. Por ello, hemos formado al personal de mantenimiento interno y en Robertpack han recibido formación de funcionamiento y mantenimiento. Nuestros montadores tienen conocimientos básicos que nos permiten resolver sin ayuda exterior los problemas menores. El control de línea por parte de los diversos robots se lleva a cabo mediante un control PLC de nivel superior suministrado por Robertpack. En él, están integrados todos los componentes especiales de la línea, ya que en este tipo de configuración la dirección no debe estar en manos del robot”.
Visch considera que los conocimientos internos de A-ware constituyen una ventaja. ‘De esta forma, nos podemos comunicar entre nosotros de otra forma y se logra una gran eficacia. La ventaja de los robots es que requieren poco mantenimiento. En esto, todos nuestros clientes de robots están de acuerdo’.
120 por minuto
En la planta de A-ware en Zeewolde, los quesos redondos ya madurados se cortan en cuñas con precisión de un gramo (E-code), siete días a la semana en tres o cinco turnos y, a continuación, se envasan. Esto se lleva a cabo en 15 líneas, cuatro de ellas con robots. Los dos robots situados por encima de las máquinas de embutido de la nueva línea (FANUC M3iA/6S para uso en la industria alimentaria) envasan las porciones de queso formadas en las dos pistas y las colocan a alta velocidad (120 piezas por minuto) sin que el queso descanse, en el paquete de embutido, que posteriormente se cierra. La máquina de carga de cajas es una máquina construida en su totalidad por Robertpack, que incluye dos robots FANUC M3A/6S para cargar las cajas, así como un dispositivo de elevación de cajas, uno de cierre de bordes de bandejas y otro de colocación de tapas. Al final de la línea, un robot FANUC M-710C/70 paletiza las cajas. La empresa cuenta con las certificaciones BRC, IFS, Skal y HACCP, y cumple los máximos niveles de calidad de la industria.
Herramientas decisivas
“Las herramientas y la programación constituyen un factor importante al elegir un proveedor’, señala Van Houwelingen, que indica que las soluciones cada vez incluyen más robots. Visch añade que Robertpack tiene mucha experiencia con las garras de los robots, que se producen en su propia fábrica. Para Van Dien y Van Houwelingen, lo más importante es que todo funcione sin problemas. ‘Tenemos cinco proveedores en una línea de 37 metros de longitud con una parte de alto nivel y otra de bajo nivel de automatización, y lo más esencial es que las máquinas se comuniquen entre sí’, declara Van Dien.
Van Houwelingen considera que es importante no incorporar demasiadas marcas de robots en las instalaciones. “Nuestra experiencia con FANUC es positiva y trabajar con la misma marca de robots es una ventaja en lo que respecta al mantenimiento y los conocimientos”.